COMO COMPRAR UN BONSÁI

En muchas ocasiones, cuando entramos en una tienda especializada en bonsáis, nos quedamos maravillados de la belleza de estos. Nuestra primera reacción es la de mirar los precios y lo bonito que se ve el Bonsái, pero eso es un error en el cual la mayoría de personas cae, y más si no tiene un mínimo conocimiento de este arte.

En la mayoría de los casos, en tiendas de jardinería o floristerías, venden sujetos que en realidad no son bonsáis, y la gente da por hecho que si lo son por simplemente tener una maceta de bonsái. 

¿QUE TENEMOS QUE TENER EN CUENTA PARA SABER SI ES UN BONSÁI?

Por supuesto, una maceta de bonsái, ya sea de cerámica, madera o concreto. La edad del árbol no es relevante, ya que depende de la especie. Hay especies que crecen y engordan con más rapidez que otros. Se tiene que ver que el sujeto haya sido trabajado, que se hayan direccionado las ramas, (si tienen alambres es la mejor señal de esto), que se hayan podado o pinzado.

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                                      Bonsái alambrado

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¿Qué debemos pagar por un bonsái?

Esto es un dilema que el cliente inexperto debe tener en cuenta, ya que en muchos establecimientos son muy abusivos a la hora de poner el precio. En muchos casos, simplemente ponen una maceta de bonsái, un plantón de árbol y cobran elevadas cantidades de dinero por el hecho de decir que es un bonsái.

Una maceta de bonsái de producción nacional, puede costar unos $15, y un plantón de árbol están entre $2.50 y $3.50, con una ganancia del 20% el árbol devería costar $22.20. En algunos casos los he llegado a ver en $40.

Entonces ¿Cual es el valor de un bonsái? Siempre depende de la especie, la edad, el diseño, la maceta y sobre todo lo que el autor quiera cobrar por el.

En definitiva, el valor de un bonsái viene a ser lo mismo que un cuadro, depende siempre del autor y lo que el haya trabajado en el y cuanto tiempo. Lo que si hay que tener en cuenta, es no caer en el engaño de la venta de algo que no es lo que publicitan.

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                                                Plantón de higuera

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Javier Angulo